top of page

Terapia Miofuncional




¿Qué es la Terapia Miofuncional?


Es un sistema terapéutico especializado que busca mejorar la armonía de las funciones orofaciales relacionadas con el habla y sus alteraciones (articulación de fonemas y/o palabras); busca mejorar desequilibrios en la musculatura utilizada para estas funciones; interviene para corregir las alteraciones en los procesos alimenticios, como: malos hábitos orofaciales (succión de dedo, de labio, de lengua, respiración bucal, babeo,etc); alteraciones en la mordida, deglución, succión, masticación, rechazo a la consistencia de los alimentos, entre otros; además interviene en alteraciones esqueléticas como labio y paladar hendido, tratamientos ortodóncicos y maxilofaciales.

Su base de trabajo es el sistema bucomaxilofacial, que se encarga de funciones vitales como la respiración, la alimentación y el habla; y otras múltiples como el bostezo, el llanto, el vómito.


¿Quién es el profesional encargado de la Terapia Miofuncional?

El profesional encargado de realizar esta intervención es el fonoaudiólogo especializado en el área Miofuncional. La terapias se realizan con acompañamiento del adulto, tutor o familiar de manera que pueda reforzar el proceso de forma permanente en la casa.

La Terapia Miofuncional implica un trabajo interdisciplinar con otros profesionales como son los odontólogos, los pediatras, los cirujanos maxilofaciales, los foniatras, los ORL, los fisioterapeutas, los terapeutas ocupacionales, los neurólogos y también los psicólogos y los educadores.

¿Y para qué sirve la Terapia Miofuncional?

El objetivo y la aplicación de la terapia varían según el tipo de trastorno y según la etiología, así:

- Alteraciones del neurodesarrollo

- Patología neurológica o neuromuscular como Parkinson, miopatías, secuelas de ACV

- Malformaciones faciales o craneofaciales como fisuras labiopalatinas, síndromes, etc.

- Otras

¿Cómo se realiza esta Terapia?

El profesional especializado en Terapia Miofuncional utiliza técnicas con orientación fisiológica siempre teniendo en cuenta el desarrollo cronológico de las funciones orofaríngeas.

Estas técnicas utilizan ejercicios para estimular la musculatura, de manera que el paciente haga conciencia de su esquema corporal y logre desarrollar adecuadas habilidades motoras. Requiere de métodos multisensoriales, porque cada canal sensorial que se trabaja es un esfuerzo adicional que favorece el aprendizaje.

La planificación del tratamiento es personal, con objetivos individuales teniendo en cuenta la edad, el tipo de alteración, el grado de compromiso y el tiempo de evolución, así como el nivel intelectual y las limitaciones agregadas.


¿Cuál es el motivo de remisión más corriente?

Hay muchas razones para remitir un paciente a Terapia Miofuncional, entre ellos los más frecuentes son:

1. Trastornos de deglución: degluciones atípicas cuyas características en el momento de la deglución son:

- Interposición lingual anterior o lateral

- Contracción de la musculatura peri oral.

- Soplo en lugar de succión.

- Movimientos asociados de cabeza.

- Ausencia de contracción de los músculos maseteros.

- Imposibilidad de deglutir con los labios abiertos.

2. Alteraciones en la articulación del habla

- Sigmatismo anterior o lateral

- Acúmulo de saliva en labios

- Pacientes que salpican al hablar

- Alteraciones en el punto de articulación de fonemas anteriores

3. Alteraciones asociadas

- Ronquidos y babeo nocturno

- Formación frecuente de sarro

- Inflamación de la encía, etc.


¿Cuándo se debe remitir un paciente a Terapia Miofuncional y por qué?

El momento de remitir un paciente varía según el tipo de compromiso o lesión que presente.

- Remisión precoz del bebé con alteraciones en las habilidades, hábitos y rutinas como: dificultad para la succión del seno, o para la alimentación con tetero, cuchara, vaso, o pitillo; otras alteraciones alimenticias o algún otro compromiso como pueden ser las insuficiencias velo palatinas, malos hábitos orofaciales que alteren el correcto desarrollo de estas funciones y puedan traer repercusiones posteriores a nivel de la producción del habla.

- En intervenciones pre o post- quirúrgicas u ortodóncicas.

- En intervención conjunta con el tratamiento ortodóncico, o con el de ORL.

Nota: Existe una discusión sobre la época en que se puede considerar madura la deglución: algunos sostienen que no se puede diagnosticar antes de los cuatro años de edad, pero en nuestra experiencia hemos visto que se puede evidenciar esta condición en niños más pequeños, por lo que es aconsejable comenzar el trabajo con los menores de esta edad para empezar a fortalecer el patrón deglutorio y el cierre labial durante la masticación y en reposo, que son los patrones que se espera que tengan establecidos a los cuatro años además de articular correctamente gran parte de los fonemas.

68 visualizaciones0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo
bottom of page